Gracias

Cuando el día se nubla y me cuesta andar Apareces tú sin necesidad de llamar

Siempre llegas a tiempo como un rayo de sol No hace falta un grito ni una señal

Tú conoces mi alma, sabes cómo llegar En el ruido del mundo, tú eres mi paz

La brújula que nunca falla jamás

Gracias por estar, por siempre creer Por ser mi refugio cuando todo va a caer

No importa el lugar ni dónde esté Tú encuentras siempre la forma de hacerme ver

Lo preciosa que es la vida, cada amanecer En los días oscuros y en los de brillar

Siempre encuentro tus manos listas para ayudar No te pido palabras, no te pido más

Tu presencia invisible siempre me da paz

Eres el eco que nunca se apaga El calor del hogar en la madrugada